Nuestro viaje continúa hacia Marco de Canaveses, cuna de personajes ilustres que llevaron el nombre de esta tierra más allá de las fronteras, con Carmen Miranda que fue un icono de los años 30 a los 50 y Belmiro de Azevedo, uno de los empresarios portugueses con más éxito del mundo.

Esta ciudad es una perfecta representación de la ruta del Císter, con sus antiguos monasterios e iglesias. También alberga comunidades de carmelitas y franciscanos, y su influencia puede apreciarse en la cultura y las fiestas locales. Históricamente, Marco de Canaveses ha sido un importante asentamiento romano, como atestiguan las ruinas de Tongóbriga. La ciudad obtuvo su fuero en 1140. Se dice que Isabel de Aragão, también conocida como Santa Isabel de Portugal, pasó por la ciudad durante sus viajes de peregrinación, y la leyenda habla de la peña de los Enamorados, una historia de dos enamorados de familias enemistadas que optaron por unirse en la muerte.

La iglesia de Santa María, diseñada por el arquitecto de renombre mundial Álvaro Siza Vieira, es una obra maestra moderna en el corazón de esta antigua ciudad donde la Feira de São Sebastião, una feria anual que se remonta al siglo XVIII, da vida y color a las calles de la ciudad, mientras se degusta el pan de maíz local, la broa, un alimento básico portugués.